Tras veinte años de investigación, un equipo de científicos del Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos (IREC, CSIC-UCLM-JCCM) y la Universidad Estatal de Oklahoma ha desarrollado una vacuna revolucionaria contra las garrapatas. El hallazgo se basa en la proteína Subolesin, identificada originalmente en 2005, y ha demostrado ser eficaz frente a múltiples especies y hospedadores, lo que representa un salto cualitativo en la lucha contra estos parásitos que afectan tanto a animales como a humanos.
Subolesin: la proteína que lo cambió todo
Las garrapatas no solo suponen un problema directo para la ganadería —por su capacidad de debilitar al ganado con sus picaduras—, sino que además actúan como vectores de enfermedades graves. Hasta ahora, los tratamientos habituales se basaban en acaricidas, con los problemas que ello conlleva: resistencias, alto coste económico y riesgo ambiental. La vacuna recién desarrollada representa una alternativa más segura, sostenible y duradera.
Subolesin fue aislada hace dos décadas en estudios con Ixodes scapularis, una especie de garrapata especialmente problemática. Su estructura, muy similar a otra proteína (Akirin) presente en vertebrados e insectos, la convirtió en candidata ideal para activar el sistema inmunitario. A partir de ahí, el Grupo SaBio del IREC impulsó una vacuna combinada con la proteína MSP1a, que no solo interfiere en la alimentación de la garrapata, sino también en la acción de ciertos patógenos que transmite.
Eficaz en campo, reconocida en el mundo
La nueva vacuna ha sido testada en condiciones reales en varios países donde las garrapatas suponen un problema sanitario. Uno de los casos más destacados ha sido Uganda, donde ha sido aplicada con éxito con el respaldo de la Organización Nacional de Agricultura (NARO). Además, la investigación ha contado con la colaboración de científicos de 27 países, lo que refuerza su proyección internacional.
El esfuerzo ha sido reconocido con el Premio Zendal de Salud Animal 2024, otorgado al equipo liderado por el doctor José de la Fuente. Este reconocimiento pone en valor el papel de la ciencia española en la innovación biotecnológica aplicada a la sanidad animal y al control de vectores, con un hallazgo que podría marcar un antes y un después en la prevención de enfermedades transmitidas por garrapatas.
En resumen: el descubrimiento de Subolesin y su aplicación vacunal sitúan a España en la vanguardia de la ciencia aplicada al medio rural, con un desarrollo que beneficia directamente a ganaderos, fauna silvestre y salud pública.

