Una noche de espera, un disparo con arco y una hamburguesa de monte: Rubén caza con la luna por testigo
En plena Castilla-La Mancha, con el calor del verano y la luna como única aliada, Rubén se enfrenta a una nueva jornada de esperas nocturnas al jabalí, esta vez con arco. La gestión cinegética no se detiene ni con vacas en los rastrojos ni con el cansancio acumulado: hay que adaptarse, cambiar el rifle por el arco y confiar, una vez más, en el térmico Knockpix Vista y en la experiencia que da llevar más de 20 años en el monte.
Tras varias noches intensas y un disparo que le deja dudas, el cazador espera al amanecer para rastrear. Y es Pepe, su teckel de rastro, quien le da la alegría: encuentra la flecha, sigue el rastro y da con la pieza. No es un gran macho, ni un viejo macareno, sino una hembra joven sin cría. Pero la magia de la caza con arco no entiende de trofeos.
La historia culmina en la cocina, donde Rubén transforma la carne del jamón en su plato favorito: una hamburguesa de jabalí con sabor a monte, pura y sin mezclas. Porque el ciclo no termina con el disparo, sino con el respeto por el animal abatido, recordando que cazar también es cocinar y compartir.

